Las páginas Web lentas provocan frustración a los usuarios y una mala imagen para la empresa. En Webs de comercio electrónico, una página Web lenta no incentiva al usuario a comprar, sino que la frustración que provoca la lentitud hace que el usuario no finalice el proceso de compra. Con estas consecuencias, es vital disponer de una página Web rápida, y aquí es donde entra el proceso de Web Performance Optimization.

Podemos definir Web Performance Optimization como un conjunto de prácticas para acelerar la carga de una página Web. Dicho de otra manera, es un conjunto de técnicas que permiten aumentar la velocidad de acceso a los contenidos de una página Web. Estas conjunto de prácticas se aplican tanto en el ámbito de la programación, para desarrollar páginas menos pesadas y más rápidas de cargar, como el ámbito de los servidores web y la distribución de los contenidos para minimizar los tiempos de respuesta y de transferencia de contenidos.

Aunque el primer objetivo de aplicar un proceso WPO es aumentar la satisfacción del usuario en cuanto visita la página, también hay que tener en cuenta que los buscadores han incorporado dentro de sus algoritmos de posicionamiento elementos de rendimiento de las páginas Web. Así pues, un página lenta está penalizada por los buscadores a la hora de posicionarla.

En definitiva, aplicar un proceso WPO para mejorar la velocidad de una página web es una oportunidad para:

- Aumentar la satisfacción de los usuarios que visitan la página Web.
- Mejorar la imagen de la empresa.
- Aumentar las ventas en comercios online.
- Mejorar el posicionamiento en los buscadores.